Dmytryk

Edward Dmytryk


 EEUU | 1908-1999






















1943 | 35 años
Falcon Strikes Back, The  
Falcon Strikes Back, The
D: Edward Dmytryk
M: Roy Webb




















1944 | 36 años
Historia de un Detective  
Murder, My Sweet
D: Edward Dmytryk
M: Roy Webb




















1945 | 37 años
Venganza  
Cornered
D: Edward Dmytryk
M: Roy Webb




















1946 | 38 años
Hasta el Fin del Tiempo  
Till the End of Time
D: Edward Dmytryk
M: Leigh Harline
Frederic Chopin



















1947 | 39 años
Encrucijada de Odios  
Crossfire
D: Edward Dmytryk
M: Roy Webb




















1949 | 41 años
Give Us This Day  
Give Us This Day
D: Edward Dmytryk
M: Benjamin Frankel




















1954 | 46 años
Lanza Rota  
Broken Lance
D: Edward Dmytryk
M: Leigh Harline




















1954 | 46 años
Motín del Caine, El  
Caine Mutiny, The
D: Edward Dmytryk
M: Max Steiner




















1955 | 47 años
Mano izquierda de Dios, La  
Left Hand of God, The
D: Edward Dmytryk
M: Victor Young




















1956 | 48 años
Montaña siniestra, La  
Mountain, The
D: Edward Dmytryk
M: Daniele Amfitheatrof




















1957 | 49 años
Arbol de la Vida, El  
Raintree County
D: Edward Dmytryk
M: Johnny Green




















1958 | 50 años
Baile de los malditos, El  
Young lions, The
D: Edward Dmytryk
M: Hugo Friedhofer




















1959 | 51 años
Hombre de las Pistolas de Oro, El  
Warlock
D: Edward Dmytryk
M: Leigh Harline




















1962 | 54 años
Gata Negra, La  
A walk on the wild side
D: Edward Dmytryk
M: Elmer Bernstein




















1964 | 56 años
Insaciables, Los  
Carpetbaggers, The
D: Edward Dmytryk
M: Elmer Bernstein




















1965 | 57 años
Espejismo  
Mirage
D: Edward Dmytryk
M: Quincy Jones




















1968 | 60 años
Shalako  
Shalako
D: Edward Dmytryk
M: Robert Farnon




















1972 | 64 años
Barba Azul  
Bluebeard
D: Edward Dmytryk
M: Ennio Morricone




















1975 | 67 años
Víctimas del terrorismo  
Human Factor, The
D: Edward Dmytryk
M: Ennio Morricone




Otros Films:

1935 THE TRIAL OF THE HAWK
1939 MILLION DOLLAR LEGS
1939 TELEVISION SPY
1940 EMERGENCY SQUAD
1940 GOLDEN GLOVES
1940 HER FIRTS ROMANCE
1940 MYSTERY SEA RAIDER
1941 SECRET OF THE LONE WOLF
1941 SWEETHEART OF THE CAMPUS
1941 THE BLONDE FROM SINGAPORE
1941 THE DEVIL COMMANDS
1941 UNDER AGE
1942 CONFESSIONS OF BOSTON BLACKIE
1942 COUNTER ESPIONAGE
1942 SEVEN MILES FROM ALCATRAZ
1943 HITLER'S CHILDREN
1943 TRAS EL SOL NACIENTE
1944 COMPAÑERO DE MI VIDA
1945 LA PATRULLA DEL CORONEL JACKSON
1947 SO WELL REMEMBERED
1948 OBSESSION
1952 EIGHT IRON MEN
1952 EL FRANCOTIRADOR
1952 MUTINY
1953 HOMBRES OLVIDADOS
1955 CITA EN HONG-KONG
1955 VIVIR UN GRAN AMOR
1959 THE BLUE ANGEL
1962 EL HOMBRE QUE NO QUERIA SER SANTO
1964 A DONDE FUE EL AMOR?
1966 ALVAREZ KELLY
1967 LA BATALLA DE ANZIO
1976 HE IS MY BROTHER



Biografía:
    Director de cine estadounidense, nacido en Grand Forks (Columbia Británica, Canadá). Creció entre los entresijos de Hollywood, es decir, como chico de los recados y proyeccionista en los años veinte bajo contrato con la Paramount, llegando a ser, para esta misma compañía, ayudante de montaje, hasta que en 1930 fue ascendido a jefe de montaje, cargo que desempeñó hasta 1939. Debuta en la dirección con un filme de muy bajo presupuesto, The trial of the Hawk (1935), pasando a hacerlo de forma regular a partir de 1939. Durante la primera mitad de los años cuarenta, Dmytryk dirigió filmes muy económicos y de orientación política y social, como Hitler’s Children (1943), un violento melodrama que cuestionaba la educación nazi, antes de dirigir sus primeras producciones de alto presupuesto, Compañero de mi vida (1944) y, sobre todo, la magnífica Historia de un detective (1944), adaptación de la aclamada novela de Raymond Chandler, Adiós Muñeca, con Dick Powell en el papel de Philip Marlowe, el detective privado que inmortalizará, dos años después, Humphrey Bogart en El sueño eterno, de Howard Hawks. Con un guion de John Paxton, el estilo de dirección de Dmytryk fue recordado como el más ágil y vibrante de los años de la guerra. Dmytryk sigue demostrando en sus siguientes películas la medida de su gran talento. Venganza (1945) es un excelente thriller antifascista, firmemente dirigido y lleno de novedades técnicas y narrativas. Hasta el final del tiempo (1946), la que para buena parte de la crítica es su mejor obra, es una sólida versión de la novela de Niven Busch The Dream of Home, sobre los problemas de adaptación de tres soldados que vuelven a sus hogares después de combatir en la Segunda Guerra Mundial, que, curiosamente, sería estrenada sólo unos meses antes de Los mejores años de nuestra vida (1946), de William Wyler. Dmytryk consiguió su única nominación al Oscar con Encrucijada de odios (1947), un profundo, inteligente y muy sutil alegato antisemita que, pese a tener ciertos matices declamatorios, reflejaba magistralmente el entorno de unos excombatientes a pocos días de su vuelta a la vida civil. En 1947, un compañero, el también director Sam Wood, pronunció su nombre delante del Comité de Actividades Antiamericanas, por lo que, tras rechazar testificar, fue acusado de desacato al Congreso, pasando a ser uno de los famosos “10 de Hollywood”. El director, ya nacionalizado norteamericano, fue rápidamente despedido de la RKO, instalándose durante unos años en Gran Bretaña, donde realizó algunos filmes. En 1951 no le queda otro remedio que regresar a los Estados Unidos para renovar su pasaporte, siendo inmediatamente arrestado y sentenciado a pasar seis meses en la cárcel. Dmytryk, moralmente destrozado, es llamado a declarar por segunda vez y es forzado a dar nombres de compañeros, con lo que consigue ser retirado de las famosas “Listas Negras”.

Algunos de sus siguientes filmes serán prestigiosas producciones de alto presupuesto, no del todo conseguidas. El Motín del Caine (1954) poseía un sólido guion, adaptado de un best-seller de Herman Wouk, pero adolecía de un cierto control de la Marina Norteamericana, que exigió un cierto número de modificaciones para atenuar la carga crítica contra la armada. Dmytryk, consciente de su talento, organiza alrededor de él una puesta en escena inteligente, realizando así una obra digna pero demasiado teatral. El árbol de la vida (1957) fue concebida por la M.G.M. como la nueva, Lo que el viento se llevó. Todo se había puesto a disposición de Dmytryk para asegurar el éxito del filme (un best-seller de Ross Lockridge, el marco de la guerra de Secesión, una intriga novelesca y la pareja protagonista de Un lugar en el sol, Elizabeth Taylor y Montgomery Clift), pero la obra no consiguió ni mucho menos, la resonancia de la célebre producción de Selznick. El baile de los malditos (1958) contiene una narración dura y compleja, donde los destinos individuales de los personajes, el enorme carisma de los protagonistas, sobre todo Monty Clift y Marlon Brando, fascinantes, perfectamente construidos, se imponen por encima de la historia. Consigue sin embargo cotas de alto dramatismo en el western: Lanza Rota (1954) es una inteligente película del oeste, con Spencer Tracy en el papel de un patriarcal ranchero que poco a poco se da cuenta de que está perdiendo el control de su imperio y su familia se fragmenta por momentos. Y El hombre de las pistolas de oro (1959), un magnífico filme, adulto, un tanto crepuscular, pero con todo el ritmo de los mejores westerns y con un Henry Fonda excepcional. En muchas de sus películas, Edward Dmytryk desplegó una sensibilidad muy cercana al trabajo de Capra: una extraordinaria fe en las personas, una ciega creencia en la virtudes de la colaboración en grupo, una profunda reverencia por la tradiciones americanas, y una fuerte y feliz utopía resuelta en conseguir ver el mal como una aberración capaz de ser corregida. Sus personajes se esfuerzan en encontrar y afirmar un sentido de dignidad personal, y normalmente lo llevan a cabo utilizando posiciones tolerantes afines a la sociedad, por muy dramáticos que sean los argumentos, incluso en Hitler’s Children o El baile de los malditos, dos películas que tienen que ver con el nazismo. Se ha argumentado normalmente que la obra de Dmytryk se vio deteriorada tras declarar delante del Comité de Actividades Antiamericanas. Lo cierto es que no conviene extrapolar el personal punto de vista de un ciudadano amenazado (fue tildado después de chivato entre sus compañeros de profesión) con una obra de auténtico autor, tan compleja, vigorosa, con algunos traspiés, cierto, sobre todo al final de su carrera, pero de una riqueza argumental y visual absolutamente innegables.  © Juan Carlos Paredes


Galardones:
1 San Sebastián Espejismo, 1965



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