Una calle "Calle mal empedrada, sucia, estrecha y torcida. Los perros y las viejas, calentándose al sol. Una posada equívoca se ofrece en un farol. La taberna. El barbero. Huele a cosa podrida. Los renegridos muros, llenos de cicatrices. En algunas ventanas, puesta a secar la ropa: cuelga una falda negra que parece una hopa. Albergue de ladrones, vagos y meretrices. Los chiquillos, desnudos, se arrastran por el lodo: "El Bengala", "El Pasmao"... Todos tienen apodo. Un coche de tercera*, negro y trágico, pasa, con la cruz en lo alto, los "pitejos" y el muerto: los baches y las piedras le hacen andar incierto, como borracho alegre que no encuentra su casa. " epdlp.com |