Sólo uno cortito (fragmento), de Colgando de un hiloDorothy Parker
Sólo uno cortito (fragmento), de Colgando de un hilo

"Me gusta este sitio, Fred. Es un sitio bonito. ¿Cómo diste con él? Creo que eres realmente maravilloso, mira que descubrir una taberna clandestina en 1928. Y te dejan entrar sin más, sin hacerte una sola pregunta. Apuesto a que serías capaz de entrar en el metro sin utilizar el nombre de alguien. ¿No, Fred?
Oh, ahora que mis ojos se van acostumbrando a él, este sitio me gusta cada vez más. No permitas que te digan que este sistema de iluminación es único, Fred; copiaron la idea de Mammoth Cave. Eres tú el que está sentado a mi lado, ¿no? Ah, a mí no me engañas. Reconocería esa rodilla en cualquier parte.
¿Sabes lo que me gusta de este sitio? Que tiene ambiente. Eso es lo que tiene. Si le pidieras al camarero que te trajese un cuchillo bastante afilado, podría cortar un buen pedazo de ambiente y llevármelo a casa. Sería interesante incluirlo en mi libro de recuerdos. Mañana mismo comenzaré a llevar un libro de recuerdos. No dejes que lo olvide.
Vaya, no sé, Fred... ¿tú qué vas a tomar? Bueno, entonces supongo que yo también tomaré un whisky con hielo y soda; por favor, solo uno cortito. ¿Es escocés de verdad? Caramba, será para mí una experiencia nueva. Tendrías que ver el escocés que tengo en casa, en el aparador; al menos, estaba en el aparador esta mañana..., a estas alturas, probablemente ya habrá perforado la botella. Me lo regalaron para mi cumpleaños. Algo es algo. En mi cumpleaños anterior, lo único que me regalaron fue un año más.
Es un bonito trago largo, ¿no? Vaya, vaya, vaya, pensar que estoy tomando escocés de verdad; por fin salgo de la tercera división. ¿Vas a tomarte otro? Bueno, no quisiera verte ahí bebiendo solo, Fred. Beber en solitario es lo que provoca la mitad de los delitos del país. Y por ese mismo motivo la Prohibición es un fracaso. Pero, por favor, Fred, dile que solo quiero uno cortito. Que sea bien suave, que apenas se note el escocés.
Será bonito comprobar el efecto del whisky de verdad sobre alguien que está acostumbrada solo a las formas más sencillas de entretenimiento. Te gustará, Fred. Te quedarás a mi lado si llega a ocurrir algo, ¿verdad? No creo que ocurra algo espectacular, pero quiero pedirte una cosa, por si acaso. No permitas que me lleve un caballo a casa. Los perros y los gatos extraviados no me importan tanto, pero los ascensoristas se ponen tremendamente pesados cuando tratas de subir un caballo. Ya que estamos, más vale que conozcas ese detalle sobre mí, Fred. Siempre se me nota cuándo vendrá el desastre porque empiezo a ponerme tierna con Nuestros Estúpidos Amigos. Tres tragos largos y me creo san Francisco de Asís.
Pero no creo que con estos vaya a ocurrirme algo. Es porque están hechos con escocés de verdad. Ahí está la diferencia. Estas copas solo hacen que te sientas bien. Ah, Fred, me siento estupendamente. Tú también, ¿no? Ya lo sabía, porque tienes mejor aspecto. Me encanta la corbata que llevas. Ah, ¿te la regaló Edith? Vaya, ¿no ha sido un bonito detalle por su parte? ¿Sabes, Fred? La mayoría de la gente es tremendamente amable. Son muy pocos los que en el fondo de su corazón no son estupendos. Tienes un corazón hermoso, Fred. Serías la primera persona a la que acudiría si tuviera problemas. Creo que eres el mejor amigo que tengo en el mundo. Pero me preocupas, Fred. De veras te lo digo. Creo que no te cuidas lo suficiente. Tendrías que cuidarte más, por el bien de tus amigos. No deberías beber todas esas porquerías que hay por ahí; tienes que tener cuidado, se lo debes a tus amigos. No te importa que te hable así, ¿verdad? Verás, cariño, detesto ver que no te cuidas, porque soy tu amiga. Me hace sufrir el verte deambular por ahí como has hecho últimamente. Deberías venir siempre a este sitio, donde tienen escocés de verdad que no puede hacerte daño. Ay, cariño, ¿de veras crees que debo? Bueno, dile que solo sea la mitad de uno cortito. Díselo, cielo.
¿Vienes aquí a menudo, Fred? No debería preocuparme tanto por ti, si supiera que estás en un sitio seguro como este. Ah, ¿aquí fue donde estuviste el jueves por la noche? Ya veo. Vaya, no, no tiene importancia, solo que me dijiste que te llamara, y yo, tonta de mí, voy y cancelo una cita que tenía solo porque pensé que iba a verte. No sé, es algo que se me ocurrió pensar así, naturalmente, cuando me dijiste que te llamara. Por Dios, no es para ponerse así. De verdad, no tiene ninguna importancia. Solo que no me pareció una manera demasiado amable de comportarse, solo eso. No lo sé..., es que creía que éramos muy buenos amigos. Yo soy tan idiota con la gente... Fred, no hay muchas personas que en el fondo sean amigas de verdad. Por un centavo, prácticamente cualquiera sería capaz de jugarte una mala pasada. Vaya si serían capaces. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com