Cuadernos de notas (fragmento)Edward Bond
Cuadernos de notas (fragmento)

"¿Tendría algún sentido componer música como la de Beethoven si supieses que sólo se iba a interpretar en una acerería, donde no se oiría ni una sola nota? ¿O sí no sólo Beethoven fuese sordo, sino que todo el mundo hubiese sido ensordecido por el Estado y sólo tú supieses repentizar música?

Da igual lo excelente que sea un artista, su arte no tiene ningún significado hasta que se sitúa en un contexto social. ¿Acaso tenía significado sólo para Beethoven? La diferencia entre el agua pura y el agua potable. Necesitamos agua pura para volverla impura bebiendo. Necesitamos ideales para volverlos impuros en nuestra vida. Pero los principios morales deben conservar su pureza o carecen de sentido y de utilidad. El arte ha de conservar su pureza moral, identificarse con ella, pero será utilizado en situaciones de concesión. El arte no debe hacer concesiones sobre el uso que de él se vaya a hacer.

El arte es una tarea ideal a la que hay que dar usos prácticos. Pero no ha de convertirse en meramente práctico –perseguir un objetivo práctico como la propaganda para un propósito limitado; o, para evitar malentendidos, un propósito que se escoja fuera de la actividad del arte–. Y, sin embargo, hay que tomar en cuenta el contexto. El arte siempre es socialmente objetivo. No subestimo la importancia que tienen los sueños en la vida de las personas. Pero tienen que incorporar las experiencias y lecciones de sus sueños en su vida, o caer bajo un tren.

El arte tiene valor político. La política es el empeño inacabable en afrontar la crisis humana. La solución se vuelve cada vez más imperativa a medida que creamos los medios para producir la solución pero carecemos de voluntad y, en verdad, de conocimiento para llegar a la solución. El arte gravita siempre hacia la crisis humana. El punto donde las personas se desesperan y donde su felicidad y su fuerza más se revelan. En cierto sentido es entonces cuando más vulnerables son; cuando el pájaro de plumaje colorido abandona su cobijo, le disparan. No lo digo por pesimismo. Sólo es que nos recuerda la vulnerabilidad. Pero hay una contradicción en esto. Se nos recuerda la fragilidad y transitoriedad de los hombres y mujeres individuales. Lo cual no significa que a su sociedad le agrade ser transitoria, frágil e inhumana. Toda vida es, en parte, una tragedia, y es probable que necesitemos experimentar esa tragedia, tomárnosla como lección para volvernos más hondamente humanos. Cuando tenemos sentido de la tragedia somos menos vulnerables, nos desesperamos con menos facilidad –o ciertamente no nos tornamos reaccionarios–. Es el sentido de la tragedia lo que nos impide ser triviales o reaccionarios.

Pero el objetivo de la política es impedir la tragedia. Debe serlo, es obvio. De lo contrario, la política es reaccionaria. Los políticos reaccionarios confían en la tragedia inherente de la vida en este sentido: la vida es cruel y competitiva, y esto sirve a un propósito más elevado, la eliminación del débil, etc. Su tragedia está en la fuerza de las personas y no (como debería) en su vulnerabilidad y «debilidad». La política reaccionaria utiliza la tragedia con fines políticos. Dado que la reacción política es inherentemente trágica, siempre se vincula a sí misma con una redención divina. Finalmente, su política será incapaz de crear una sociedad feliz. "



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