El barquito chiquitito (fragmento)Antonio Tabucchi
El barquito chiquitito (fragmento)

"No me acuerdo de si me había quedado dormido, estaba en casa, no me lo esperaba. Oí un motor, parecía más un camión que un automóvil. Me asomé a la ventana pero no conseguía ver nada, porque el camión permanecía detrás de la iglesia. Había apagado el motor pero seguía con los faros encendidos, de manera que dos cilindros de luz asomaban de la oscuridad dirigidos a la plaza. Entonces me vestí, quería salir vestido como es debido. Ellos empezaron a cantar sus canciones y silbaban como se silba a las ovejas. Iban de casa en casa sacando a la gente. Yo pensé: salgo yo solo, porque no quería que me sacaran, quería salir por mi propio pie, vestido, sin que me empujaran, de modo que me uní a los demás, que estaban ya alineados en la plaza, muchos descalzos y en calzoncillos, incluso los más ancianos. Los que dirigían el tráfico eran los hermanos Piazzi con las borlas bailándoles en el cuello. También a tu padre le había dado tiempo a vestirse. Tu padre era un hombre muy estimado. Lo golpearon con saquitos de arena, porque se avergonzaban de dejarle marcas en la cara. Con saquitos de arena en los hombros, que no dejan marcas por arriba y las dejan por abajo, con el tiempo. Pero ¿sabes tú por qué te cuento esto, Amelia? ¿Qué necesidad hay? ¿Y yo? Verás, yo era un hombre delgado y fuerte, no había problema, podía sangrar tranquilamente y llevar marcas. Así que... Pero ¿Qué necesidad hay, Amelia? "


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