Mota Coqueiro ou a Pena de Morte (fragmento)José do Patrocínio
Mota Coqueiro ou a Pena de Morte (fragmento)

"Despertado de su postración, revivido de su desánimo por los sollozos de conmiseración espontánea de aquella mujer, el acusado reunió de nuevo sus fuerzas y se volvió hacia la mujer llorosa, diciendo:
- Llora, hija mía, porque muero inocente.
Para ahogar la voz del condenado, los tambores retumbaron durante largo rato y se le indicó al verdugo que comenzara su misión.
El monstruo apretó con más fuerza el brazo del lívido paciente; Lo arrastró hacia las escaleras y, colocándose detrás de él, lo hizo subir los escalones hacia la horca.
Abajo, los hermanos de la Misericordia y los sacerdotes reunidos alrededor de la cruz, colocaron su estandarte en posición de cubrir al condenado, en caso de que la cuerda se rompiera.
Fue una esperanza vana: la cuerda había sido enviada especialmente por una alta autoridad de la provincia, y los abusos de la propia cofradía hicieron inútil su intervención en favor de los infortunados condenados a una muerte infame.
El verdugo y el acusado habían llegado al andén. El subastador leyó por última vez la sentencia íntegra que condenaba a muerte y a las multas establecidas por la ley al acusado Mota Coqueiro, quien ordenó los asesinatos de Francisco Benedito da Silva, su esposa y un hijo de dieciocho a diecinueve años, dos hijas mayores de catorce, dos mayores de siete y una de dos a tres años y, después de la lectura, el magistrado ordenó al verdugo cumplir con su deber.
El negro instrumento de la muerte, después de colocarse la gorra roja sobre su cabeza rizada y probar con violentos tirones la seguridad de las esposas del prisionero, tomó la capucha que colgaba de su espalda y le cubrió el rostro con ella. Comenzó a desenrollar la cuerda de la cintura del paciente y a ajustar el nudo alrededor de su cuello. Hecho esto, condujo al desafortunado hombre hasta una pequeña escalera colocada entre la plataforma y la viga; Lo colocó en uno de los escalones y procedió a atar la cuerda a dos ganchos de hierro clavados en lo alto de la horca. "



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