Manlet (fragmento)María Velasco
Manlet (fragmento)

"GERTRUDIS– Yo soy Gertrud. Conocí a mi segundo marido en un transatlántico de lujo. Allí mismo nos casó el capitán del barco en una réplica cartón piedra de la Sixtina. La ex de mi marido y el animador cultural fueron los testigos. Intercambiamos arras de chocolate y anillos vibradores en lugar de alianzas. Mi hijo Hamlet, que fue a buscarme al apeadero en su deportivo, enseguida atisbó, pese al cuello mao de mi vestido y el autobronceador, un pequeño hematoma en... Anda, hijo, ¿cenamos fuera? Hamlet tira del mantel y acusa a Gertrud: «las perras están altas dos veces al año, tú, madre, los trescientos sesenta y cinco días». Le digo, mira, Hamlet bonito, no voy a comerme la sopa recalentada. El luto no puede durar siempre y me temo que me gustan demasiado el azul eléctrico y el rosa pastel. Al día siguiente, Hamlet saca del armario todos mis vestidos de corte Chanel y los lleva a la parroquia. ¿Qué va a ser lo siguiente? ¿Me arrojarás ácido a la cara como en el Tercer Mundo? En las paredes de mi dormitorio escribe la palabra «padre» en diferentes idiomas. Father, père, padre, pater, vater, πατέρας… ¡Gertrud pasó las últimas horas de su juventud en el hospital privado, con el conejo para arriba y el conejo para abajo! Los enfermos exhibían sus malformaciones en el pasillo como las putas sus encantos en el Barrio Rojo. Y mientras, ¿qué hacías tú, eh? Hamlet nadaba todavía en el Aquapark del líquido intrauterino. Hamlet se deslizaba por los toboganes de la sobreprotección materna. Hamlet insulta a Gertrud: «en lugar de parirme pudiste tirarte un pedo». Tienes treinta años, vete de mi casa, ocupa la del vecino, compra un billete de Interrail, eres joven, ponte una camiseta del Che Guevara, pero a mí no me jodas. Cuando voy a ponerme la crema doble acción, descubro que Hamlet ha vaciado mis cosméticos y los ha rellenado con las mismísimas cenizas de su padre. «Basta ya de botox y de hilos de oro». ¡Me hierve la sangre! «Pero si tú ya tienes la menopausia, mamá». «¿Ves esta cicatriz?». Bonita cesárea. Tú, deberías sufragar su pigmentación. Hasta para eso tenías que ser especial: yo nazco de nalgas. ¡No es fácil volver a tener un orgasmo después de dilatar diez centímetros en el parto!"


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