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Pro Tempore (fragmento) "La Sra. Thorpe dejó su asiento y, empujando el largo sillón en el que había estado sentada su hija un poco más hacia las sombras, se dejó caer en él. Cada hueso y músculo de su cuerpo le dolía y palpitaba. Se había levantado al amanecer para condensar el duro trabajo de un día en la madrugada; Había cocinado, barrido y luego había estado de pie haciendo visitas durante toda la larga y calurosa tarde, pero finalmente la piadosa quietud de la cálida noche de junio la venció y se quedó dormida. Pasó casi una hora antes de que la despertara el profesor Thorpe, que subía lentamente por el camino de grava. Se dejó caer en lo alto de los escalones con un suspiro cansado y se quitó la gorra Oxford ajustada para abanicarse; pero de repente, como si hubiera olvidado algo, se levantó de un salto y estaba a medio camino del porche cuando se detuvo, regresó a su lugar y se sentó de nuevo, tamborileando nerviosamente sobre su rodilla con las yemas de los dedos." epdlp.com |