Mantengan el pánico "«Morir es solo no ser visto», sostiene el eterno alcohólico local, guardián del Jardín cubierto de maleza. El tiempo aquí, en lugares lúgubres, carece de tiempo. Ahora está nublado, pero quieto. Nadie duerme. Bajo mis ventanas rechina el antediluviano tranvía amarillo núm. 25. «Pax tecum», el mensajero veloz de todos los lugares ocupados y desocupados. Todo sucede. Y espero que yo también. Parece que el tiempo dura y la miseria se acumula. Encuentro muchas huellas vivas. Desde el teclado me trepa una pequeña hormiga terriblemente movediza – casi invisible. Y en cualquier momento puede desaparecer o explotar." epdlp.com |