El día, de La enredadera del júbilo "Hablé. Nosotros lo comprenderíamos. ¿Iba la noche a retener tu entrega? Por la ventana el mar que no separa. Seremos uno interminablemente. Ahora estás conmigo. Qué seguro, qué distinto es el ser: en su coraje me alcanzas. ¡Para siempre! Los poderes, indolentes, ajenos, conocidos. Hablé. Nosotros lo comprenderíamos. ¿Iba la noche a retener tu entrega? Por la red el erial que nos separa. Desnudos, absolutos, luminosos. Esa boca aquí, cerca, nuestra, mía, nuestra, tuya: si tuya, mía, mía: lo feraz: arrecife de transcursos: que yo, por ti, soy yo, todas tus veces. Hablé. Nosotros lo comprenderíamos. ¿Iba la noche a retener tu entrega? Por lo ayer el fanal que nos separa. En torbellino, frágiles, amándonos. Ahora estoy contigo. Realidad, ahora puedes afrontar el mar: en la eficacia, el mar, con resistencia, se levanta hacia el sol. Tú estás conmigo. Ventana. Red. Lo ayer. ¿Qué nos separa? Seremos uno, interminablemente desnudos, absolutos, luminosos, en torbellino, frágiles, amándonos. " epdlp.com |