Los papeles de Overlook House (fragmento)Caspar Almore
Los papeles de Overlook House (fragmento)

"El día posterior a mi llegada, la señorita Meta y yo estábamos de regreso a la casa, después de haber recorrido varios kilómetros en trineo. Nos sentíamos extasiados, leves, como si pudiéramos volar sobre la tierra y el mar, compitiendo con las alondras al unísono de la brillante mañana, o incluso con algún ambicioso halcón en horas más afortunadas, o con el águila, deslizándonos sobre la nieve. Pero por encima de todo esto, era consciente de la fruición que me causaba su dulce compañía, que me agasajaba como el tronar de las campanas, las cuales habían sido generosamente dispuestas por César en torno a los caballos. Me he preguntado acerca del misterio por el cual algunos de los seres más hermosos con los que Dios enriqueció la tierra se desarrollan inesperadamente ante nosotros sin que tengamos la menor idea de su carácter. Cómo concebir la pureza inefable de la mujer, la profundidad de su afecto, su capacidad de simpatía, que incluso en los estadios inferiores se torna una bendición en un mundo con tantas pruebas. Cómo puede, en casos de una elevada perfección, evidenciarse con tan pocas palabras, en un acto que requiere de autonegación, en torno de la tristeza ante los pequeños sufrimientos y de contenida dicha ante la presencia de alguien que es feliz. Hay algunos hombres en quienes puedes depositar tu confianza, toda vez que contemplas la amabilidad de sus ojos, la seriedad de su expresión y escuchas su voz. Tras tantas decepciones, perdura en la vida una confianza extemporánea que libremente puede confesar aquello que llevamos en nuestro interior a lo largo de tantos años en la tierra, y por último decir que si en nuestros corazones no hallamos reposo, el fallo está en nosotros mismos. Nos juzgamos a nosotros mismos tratando de ser verdaderos hombres y no podemos realizar milagros, por sí solos, en medio del resto de la familia humana. Pero si tenemos la capacidad de adquirir confianza extrema con algunos de nuestros semejantes, en tanto tengamos conocimiento de ellos y en tanto sintamos que podemos otorgarles nuestras impresiones, lo cual es en sí mismo un lenitivo para nuestra raza. ¿Cuántos años han transcurrido desde que conformé mis primeras impresiones en relación a Meta? Profecías inaudibles que se manifiestan en el silencio se dieron a conocer ante su presencia, prometiendo interminables caricias y una vida de boato. Había una necesidad imperiosa en su noble naturaleza, que se alzaba al punto de que ningún poder de la tierra podía contenerla, con estricta exactitud incluso en sus aspectos más insignificantes, como mandamientos tendentes al logro de la verdadera vida.
Un entusiasta podría haber dicho que su misma risa era demasiado pura para este mundo. Todas las influencias excelsas son imprescindibles para nosotros. Es vital para la tierra que entre nosotros haya quien goce de la estimación humana, seres que hacen más digno nuestro mundo. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com