Camuflaje (fragmento)Joe Haldeman
Camuflaje (fragmento)

"Con un número suficientemente grande de espacios, la diferencia entre orden y caos es evidente. El ejemplo de Drake tenía 551 caracteres, que formaban un mapa de veintinueve por diecinueve espacios. Por supuesto, no formaba una palabra inglesa; de hecho, se suponía que era una señal entrante: mostraba un dibujo tosco de una criatura alienígena y un diagrama de su sistema solar, junto con figuras que indicaban que era una forma de vida basada en el carbono, que tenía una altura de treinta y dos longitudes de onda y que había siete mil millones de individuos en su planeta -y tres mil colonos en el siguiente planeta, y once exploradores en otro más.
El mensaje que Jan enviaría al artefacto empleaba la misma técnica, aunque podría ser mucho más elaborado, ya que el receptor se encontraba a unos centímetros de distancia y no a años luz. Empezando con la misma aritmética y matemática, iba más allá de los diagramas de criaturas de líneas más ADN para ofrecer representaciones digitales de la relatividad einsteniana, fotografías de varias personas, una fuga de Bach, una de las vistas del monte Fuji de Hokusai y La joven de la perla de Vermeer en blanco y negro.
Se precisaron unos quince minutos para transmitir la señal. Enfocando zonas diversas del artefacto, la enviaron en todas las frecuencias desde las microondas hasta los rayos X; la teclearon mecánicamente sobre la superficie del objeto. Evidentemente, tampoco había forma de predecir cuál sería la respuesta. Quizá estuviese respondiendo de alguna forma que no pudiesen detectar -diciendo algo como «¡Callaos y dejadme en paz!». Pero era razonable esperar que respondiese de forma similar al mensaje: luz o sonido en una secuencia binaria similar.
Evidentemente, podría ser una máquina tonta capaz de moverse para evitar sufrir daño pero poco más.
Después de dos semanas sin resultados, Jan se sintió desanimada. Pidió a Russ y a Jack que se reuniesen con ella en Sails para comer y pensar en la estrategia.
Los dos hombres se presentaron juntos justo cuando comenzaba la tormenta de la puesta de sol. El sol era una bola roja apagada en el horizonte mientras las láminas de agua descendían sobre el puerto. No había truenos ni rayos; simplemente un chaparrón incesante.
-Otro día maravilloso en el paraíso -dijo ella.
-¿E.T. no ha llamado a casa? -dijo Jack al sentarse.
-Obtuvo un «número ocupado». -Apareció el camarero con la lista de vinos. Jack la rechazó y pidió una botella de Bin 43.
-Bien, ¿qué opinas?
-Oh, no sé. -Jan volvió a llenarse la taza de café empleando un termo plateado-. Supongo que es hora de pasar a la fase de ambiente planetario. Si reacciona a algo, entonces podré repetir el algoritmo de Drake. -Tomó un sorbo de café-. Como dices, Russ, quizá esté dormido o en estado de hibernación. Quizá si reproducimos las condiciones de su planeta natal se muestre dispuesto a hablar.
Jan hizo una mueca cuando un cambio del viento la mojó un poco. "



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