Conocimiento práctico y conocimiento del lenguaje (fragmento)Michael Dummett
Conocimiento práctico y conocimiento del lenguaje (fragmento)

"El lenguaje tiene dos papeles, desempeña dos funciones: ser instrumento de comunicación, y ser vehículo del pensamiento. Surge la siguiente pregunta: ¿cuál de estas dos funciones es la primaria? Antes del filósofo alemán Gottlob Frege, el punto de vista común entre los filósofos era que el lenguaje es un código para el pensamiento. Según este enfoque, el pensamiento no necesita ningún vehículo. Una vez que tenemos el lenguaje podemos, si queremos, pensar en palabras, y así utilizar el lenguaje como vehículo del pensamiento; pero no necesitamos vehículo alguno para nuestros pensamientos, ya que podemos pensar esos pensamientos sin expresarlos de ninguna manera, incluso a nosotros mismos, con palabras o de cualquier otra forma. Por lo tanto, según este enfoque, el papel primario y el único esencial del lenguaje es el de ser un instrumento para la comunicación: necesitamos el lenguaje para llevar pensamientos de una persona a otra, por la sencilla razón de que carecemos de la facultad de telepatía, es decir, de la capacidad de transmitir pensamientos directamente.
Una posible objeción que se puede hacer a este planteamiento es que, en el caso de la mayoría de los conceptos, salvo los más simples, no podemos explicar lo que es entenderlos, con anterioridad a la habilidad de expresarlos con el lenguaje. Como advirtió Wittgenstein, un perro puede esperar que vuelva a casa su amo, pero no puede suponer que vendrá el martes que viene; y esto es así porque el perro no puede hacer nada para manifestar una expectación de que su amo volverá a casa el martes que viene. No tiene sentido atribuir a un ser sin lenguaje la captación del concepto expresado por las palabras 'el martes que viene'.
Ésta no constituye, sin embargo, la principal objeción. La concepción del lenguaje como un código para el pensamiento lleva consigo la comparación del dominio de una persona con respecto a su lengua materna y a una segunda lengua. Su dominio de una segunda lengua puede representarse como el dominio de un esquema de traducción entre ella y su idioma materno: apelando a dicho esquema, el sujeto puede asociar expresiones de la segunda lengua con expresiones de su lengua materna. De modo semejante, su dominio de la lengua materna se considera, según esta concepción, como su habilidad de asociar con cada una de las palabras el concepto correspondiente, y con cada frase del idioma un pensamiento compuesto de tales conceptos. "



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