Blanca Sol (fragmento)Mercedes Cabello de Carbonera
Blanca Sol (fragmento)

"Estos y otros semejantes, eran los diálogos, que Blanca sostenía con frecuencia, para mantener, como las vírgenes de Yesta, el fuego sagrado del amor, en el corazón de sus adoradores.
Así daba pábulo á las pretensiones de los vanidosos, de los necios y de los pequeños que necesitaban del nombre de amantes de ella, como de un pedestal, para levantarse algo más arriba del suelo.
Ninguno de sus enamorados consideraba ser el único excluido de los favores de la señora de Bubio; lejos de esto, esperaban su turno, para cuando ella se cansara del preferido, del que todos miraban con envidiosos ojos. Por entonces el preferido era, al decir de ellos, un Ministro de Estado, un señor de muy altas campanillas que Blanca como en los tiempos de su soltería, aceptaba tan sólo por interés, por especulación, y puesto que Alcides era hombre acaudalado no le sería difícil realizar su propósito.
Si la noche de la cena se dijo, que' Blanca se reía de Alcides como se había reído de todos los presentes, y no tan sólo como medio de herir su amor propio, Luciano se frotaba las manos de contento. Estaba en posesión de un gran secreto que debía llenar de asombro á la señora de Bubio.
Qué diría cuando él la dijera. —Su honor está en peligro; yo poseo la clave para salvarlo, para descubrir el complot urdido contra Ú. Yo que la amo y en servicio de U. traiciono la amistad á cambio de una mirada cariñosa, de una palabra de afecto. "



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