1944 | 32 años Nadie escapará None Shall Escape D: André de Toth M: Ernst Toch |
1947 | 35 años Otro Amor, El Other Love, The D: André de Toth M: Miklós Rózsa |
1948 | 36 años Pitfall Pitfall D: André de Toth M: Louis Forbes |
1952 | 40 años Honor del Capitán Lex, El Springfield Rifle D: André de Toth M: Max Steiner |
1953 | 41 años Crímenes del Museo de Cera, Los House of Wax D: André de Toth M: David Buttolph |
1958 | 46 años Doble espía, El Two-Headed Spy, The D: André de Toth M: Gerard Schurmann |
1959 | 47 años Día de los forajidos, El Day of the Outlaw D: André de Toth M: Alexander Courage |
1961 | 49 años Mongoles, Los I Mongoli D: André de Toth M: Mario Nascimbene |
Otros Films: 1939 KET LANY AZ UTCAN 1939 OT DRA 40 1939 SEMMELWEISS 1939 TOPRINI NASZ BALALAIKA 1943 PASSPORT TO SUEZ 1944 AGUAS TURBIAS 1947 LA MUJER DE FUEGO 1949 FURIA DEL TROPICO 1951 LUCHA A MUERTE 1952 CARSON CITY 1953 CRIME WAVE 1953 LAST OF THE COMANCHES 1953 THE STRANGER WORE A GUN 1953 THUNDER OVER THE PLAINS 1954 RIDING SHOTGUN 1954 TANGANIKA 1954 THE BOUNTY HUNTER 1955 PACTO DE HONOR 1957 HIDDEN FEAR 1957 MONKEY ON MY BACK 1960 MORGAN IL PIRATA (CON PRIMO ZEGLIO) 1960 PENDIENTE DE UN HILO 1963 ORO PARA EL CESAR (CON RICCARDO FREDA Y SABATINO CIUFFINI) 1968 MERCENARIOS SIN GLORIA Biografía: Director de cine húngaro nacionalizado estadounidense nacido en Makó (Hungría). Su verdadero nombre era Endre Antal Mihály. Tras estudiar en la Universidad de Budapest emigró a Austria, donde trabajó desde 1929 para la productora cinematográfica Bavaria Film. Una vez finalizados sus estudios de Derecho, se integró en diversos grupos teatrales. En 1939 los alemanes le obligaron a filmar la invasión de Polonia; se trasladó entonces de nuevo a Hungría y continuó su carrera en el cine. Llegó a dirigir varias películas en un breve período de tiempo, pero la situación política le llevó a emigrar a Inglaterra, donde fue contratado por su compatriota Alexander Korda, con quien ya había trabajado en su país. Durante estos años participó como ayudante de producción en Las cuatro plumas (1940), de Zoltan Korda y El ladrón de Bagdad (1940), de Michael Powell, y como director de segunda unidad en la productora London Films. Tras pasar más de cuatro años trabajando para Korda, decidió marcharse a Estados Unidos para dirigir su primer largometraje en la industria de Hollywood, el modesto thriller de espías Passport to Suez (1943). Dirigió para el productor independiente Harry Cohn, None shall escape (1944), película contra el nazismo que se adelantaba dos años al proceso de Nuremberg para contar la historia de un hipotético juicio a criminales nazis por un jurado internacional y que se encuentra entre lo mejor de la obra de De Toth como director. En 1944 se casó con la actriz Veronica Lake, una de las grandes estrellas del cine negro del momento. De Toth realizó buena parte de su filmografía dentro de ese género, como prueban películas de la talla de Aguas turbias (1944), protagonizada por Merle Oberon y Franchot Tone, y Pitfall (1948), una pequeña joya del cine negro con Dick Powell como un típico americano medio perseguido por un asesino magistralmente interpretado por Raymond Burr. El propio director escribió el guion en colaboración con William Bowers, con quien firmó poco tiempo después El fugitivo (1950), de Henry King, un clásico del cine del Oeste. De Toth iba a ser el encargado de la dirección del proyecto, pero se retiró al no estar de acuerdo con la elección de Gregory Peck como protagonista. Pese a todo, estuvo nominado al Oscar de la Academia al Mejor Guion. Dentro del western dirigió algunas de sus mejores obras, como por ejemplo La mujer de fuego (1947), con Joel McCrea y su esposa Veronica Lake. Colaboró con Randolph Scott en dos películas fundamentales de su carrera, Carson City (1952) y Lucha a muerte (1951). Cineasta independiente, rechazó comprometerse por contrato con ningún productor y negoció sus proyectos película a película, algo que no era muy frecuente en la época. La enorme fuerza visual de su estilo y su ritmo para la acción le permitieron afrontar los proyectos más variados. Con Los crímenes del museo de cera (1953) se convirtió en el primer director tuerto de la historia del cine que dirigía una película en tres dimensiones; tuvo con ella un enorme éxito de público. Interpretada por Vincent Price e inspirada en la producción del mismo título de Michael Curtiz, es una de las más grandes películas de terror de serie B de su época. Tras dirigir un buen número de obras en Hollywood, en los años sesenta se marchó a Italia, donde codirigió con sus colegas italianos tres películas de escaso interés en un período casi vacacional de su filmografía. Se convirtió en asesor del productor Harry Salzman, con quien colaboró en El cerebro de un billón de dólares (1967), del británico Ken Russell. Tras cinco años sin dirigir, sustituyó al francés René Clemént y rodó una de sus obras maestras, Mercenarios sin gloria (1968), una feroz película antimilitarista interpretada por Michael Caine y Nigel Davenport. Su último trabajo fue como director de la segunda unidad en Superman (1978), de Richard Donner. © F. Pascual |