1459 | 28 años San Sebastián Temple sobre tabla. Kunsthistorisches Museum. Viena 68 x 30 cm. |
1462 | 31 años Francesco Gonzaga Temple sobre tabla. Museo di Capodimonte. Nápoles 25.5 x 18 cm. |
1470 | 39 años La batalla de los dioses marinos Temple sobre tabla. Colección particular 28.3 x 82.6 cm. |
1474 | 43 años Techo de la Cámara de los esposos Fresco. Palacio Ducal. Mantua 270 cm. (diámetro) |
1490 | 59 años Cristo muerto Temple sobre lienzo Pinacoteca de Brera. Milán 66 x 81 cm. |
1496 | 65 años Madonna de la Victoria Temple sobre tabla. Museo del Louvre. París 285 x 168 cm. |
1497 | 66 años Parnaso Óleo sobre tabla. Museo del Louvre. París 159 x 192 cm. |
1500 | 69 años Ecce Homo Óleo sobre témpera. Museo Jacquemart-André. París 54 x 42 cm. |
Biografía: Uno de los pintores más importantes del siglo XV en el norte de Italia. Maestro de la perspectiva y el escorzo, contribuyó de manera destacada al desarrollo de las técnicas compositivas de la pintura renacentista. Nacido en Isola di Carturo, cerca de Vicenza, el año 1431, un documento de 1441 le menciona como aprendiz e hijo adoptivo del pintor Francesco Squarcione en Padua. Demostró siempre un apasionado interés por la antigüedad clásica. La influencia tanto de la antigua escultura romana como de las obras de su contemporáneo Donatello son evidentes en el tratamiento que Mantegna confiere a sus figuras humanas. Éstas se distinguen por su solidez, rotundidad, volumen, expresividad y precisión anatómica. Los principales trabajos llevados a cabo por Mantegna en Padua fueron de tipo religioso. Uno de los primeros y más destacados fue la serie de frescos que sobre la vida de Santiago y san Cristóbal hiciera para la Capilla Ovetari en la Iglesia de los Eremitani (1456, seriamente dañados durante la II Guerra Mundial). En 1459 Mantegna viajó a Mantua como pintor de corte de la familia Gonzaga, cambiando su temática religiosa por la secular y los motivos alegóricos. De esta época destaca El tránsito de la Virgen (1462, Museo del Prado, Madrid). Su obra maestra fue el conjunto de frescos (1465-1474) de la Cámara de los Esposos en el Palacio Ducal de Mantua. Con esta obra el arte de la perspectiva ilusionista alcanzó nuevos límites, convirtiéndose en el prototipo del trompe-l oeil (trampantojo) tan desarrollado luego en el arte barroco y rococó. Las refinadas figuras cortesanas no aparecen sólo representadas contra el fondo de la pared, sino dentro de un efectista espacio tridimensional, como si las paredes hubieran desaparecido. La ilusión se prolonga hasta el techo, que parece estar abierto al cielo, con sirvientes, un pavo real y querubines apoyados y reclinados sobre una barandilla. Los últimos trabajos de Mantegna tuvieron diferentes calidades. Su mayor encargo, la serie de nueve lienzos Los triunfos del César (1489, Hampton Court Palace, Inglaterra), presenta un clasicismo bastante seco, frío, mientras que el Parnaso (1497, Louvre, París), pintura alegórica, es su trabajo más fresco y animado. Su obra nunca cesó de ser innovadora. En la Virgen de la Victoria (1495, Louvre) introdujo un nuevo criterio compositivo, basado en las diagonales, muy explotado más tarde por Correggio, mientras que su Cristo muerto (1506, Pinacoteca Brera, Milán) es un forzado escorzo que anuncia el manierismo. Mantegna, una de las figuras artísticas clave de la segunda mitad del siglo XV, dominó e influyó durante 50 años en la pintura del norte de Italia. También gracias a él algunos artistas alemanes, sobre todo Alberto Durero, pudieron conocer los descubrimientos artísticos del renacimiento italiano. © M.E. |