Nosotros en la noche (fragmento) Kent Haruf
Nosotros en la noche (fragmento)

"Quería ser poeta. Creo que solo lo sabía Diane. Estudié literatura en la universidad al tiempo que me sacaba el título de maestro. Pero me volvía loco la poesía. Todos los poetas que leíamos entonces. T. S. Eliot. Dylan Thomas. E.E. Cummings. Robert Frost. Walt Whitman. Emily Dickinson. Poemas sueltos de Housman y Matthew Arnold y John Donne. Los sonetos de Shakespeare. Browning. Tennyson. Me aprendí algunos de memoria.
¿Todavía los recuerdas?
Recitó los primeros versos de «La canción de amor de J. Alfred Prufrock». Unos cuantos versos de «La colina de los helechos» y otros de «Y la muerte no tendrá señorío».
¿Qué pasó?
¿Te refieres a por qué no seguí?
Se diría que todavía te interesa.
Me interesa. Pero no como antes. Empecé a dar clases y nació Holly y estaba demasiado ocupado. En verano trabajaba pintando casas. Necesitábamos dinero. O al menos lo pensaba.
Me acuerdo de cuando pintabas casas. Con otro par de profesores.
Diane no quería trabajar y yo estaba de acuerdo en que Holly debía tener a alguien con ella en casa. De modo que escribía un poco por las noches o los fines de semana. Me aceptaron un par de poemas en revistas y semanarios, pero me rechazaban la mayoría, me los devolvían sin ni siquiera una nota. Si alguna vez recibía algo de algún editor, unas palabras o una frase, me lo tomaba como un estímulo que me daba para vivir durante meses. Ahora no me sorprende. Eran unos poemas horribles. Imitaciones. De una complejidad innecesaria. Recuerdo un verso de uno que hablaba del azul iris, que no está mal, pero dividí la palabra «iris». "



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