Madonna (fragmento)Theodor Mundt
Madonna (fragmento)

"Ella también se había levantado y me estremecí al ver que sonreía ante la afluencia de mis precipitadas palabras y, no obstante, algo como el incipiente hálito de una lágrima brilló en sus ojos. Entonces, al acercarme a ella de nuevo, ella simuló estar preocupada por su padre que, como era habitual, se había quedado dormido en el sillón. Agitó su mano reclamando mi silencio y se dispuso a convocar a la doncella para que la sirvienta llevara al anciano a su habitación.
Luego volvió a salir de nuevo, visiblemente divertida y despreocupada. Era como si se sintiera más libre, moviéndose con gracia y ligereza e incluso su figura parecía agrandarse y se tornaba más elegante. Se paró justo delante de mí como si su ánimo la impeliera a decirme algo sin recato alguno, pero de nuevo se ensimismó en un obstinado silencio mientras su efigie se mecía en la delectación de una tranquila contemplación.
Traté de reclamar su atención invitándola a dar un paseo por el jardín. La resucitada luna brillaba en auge sobre los árboles y arbustos. La noche se terciaba fresca, encantadora y sin reticencia alguna. "



El Poder de la Palabra
epdlp.com