Julien Benda La traición de los intelectuales (fragmento) "Los intelectuales modernos han predicado este realismo no sólo a las naciones sino también, a las clases. La clase obrera igual que a la clase burguesa les han dicho: organizaos, sed más fuertes, apoderaos del poder o esforzaos por conservarlo si ya lo tenéis; no os importe que en vuestras relaciones con la clase antagónica reinen más caridad, más justicia o cualquier otra “tontería" que os molestan desde tiempo atrás. Pero, al decir eso, no han agregado: sed así porque tal lo quiere la necesidad. Han declarado (esa es la novedad); volveos así porque así lo exige la moral estética; quererse fuerte es señal de un alma elevada; quererse justo, es señal de un alma baja. Tal es la lección de Nietzsche, de Sorel, aplaudidos en toda una Europa llamada pensante. Ese es el entusiasmo de esa Europa, en la medida que el socialismo la atrae, por la doctrina de Marx y su desdén para la de Proudhon. Y los intelectuales han hablado con igual lenguaje a los partidos que se combaten en el interior de una misma nación: volveos los más fuertes, han dicho a uno u otro según su pasión, y eliminad lo que os estorbe; liberaos de la simpleza que os mueve a dejar sitio al adversario y establecer coa él un régimen de justicia y armonía. Ya se sabe la admiración de todo un ejército de "pensadores" de todos los países hacia el gobierno italiano que sencillamente, coloca fuera de la ley a todos sus conciudadanos que no lo aprueban. Hasta nuestros días, los educadores del alma humana, discípulos de Aristóteles, convidaban al hombre a derribar un Estado que fuera una facción organizada; los alumnos de los señores Mussolini y Maurras enseñan a reverenciar a un Estado así. " El Poder de la Palabra epdlp.com