|
Paisajes del Romanticismo musical (fragmento) "Con su curso dulcemente acariciado por la oscilación pendular del acompañamiento, y en su misma sencillez, la presente pieza ilustra como pocas la poética del autor checo, por la que todo aquello que no sea esencial a la expresión directa de su emoción más íntima es eliminado, sin concesiones retóricas de ningún tipo: se trata de atrapar el momento único e irrepetible, en una formulación todavía no mediatizada y sometida al control de instancias y exigencias externas a ella misma y a su propia especificidad. Condiciones –inmediatez expresiva y despojamiento de toda retórica– que Milan Kundera cree descubrir tanto en el diseño general de las obras de formato grande del maestro, en particular las óperas, como en sus piezas para piano, preferentemente las incluidas en la colección antes mencionada, Po zarostlém chodní č ku, especie de diario íntimo compuesto en circunstancias personales difíciles, marcadas por la muerte de su hija Olga: destaca, a este respecto, por su intensidad emocional, la pieza titulada «Sanglots», Larghetto. Ello se traduce, musicalmente, en la progresiva atomización de la materia temática en quantums expresivos sumamente individualizados y autocontenidos. El intenso efecto expresivo deriva, en muchos casos, paradójicamente, de motivos extremadamente sucintos y más bien neutros, casi taquigráficos, provenientes en muchos casos de la prosodia y entonaciones de la lengua checa, que él tomaba al dictado en los tranvías o paseando por Brno. La proximidad en el tiempo de la obra mencionada y el Pelléas de Debussy es algo más que una simple coincidencia. " epdlp.com |