Discurso acerca de las pasiones del amor (fragmento)Blaise Pascal
Discurso acerca de las pasiones del amor (fragmento)

"Este nuevo punto de vista le inspira temor e inquieta la tranquilidad que hallaba en las cosas que solían deleitarla.
Ya no puede saborear a gusto las cosas que la complacían. Un incesante escrúpulo se opone a este goce y esta visión interior ya no le permite disfrutar de los deleites que acostumbraba encontrar en las cosas a las que efusivamente solía entregarse de todo corazón.
Pero resulta aun mayor la amargura que le producen los ejercicios piadosos que la que se ha apoderado de las vanidades del mundo. Por una parte, la presencia de los objetos visibles la conmueve más que la esperanza de los invisibles y, por la otra, la solidez de las cosas invisibles la conmueve más que la vanidad de las visibles. De esta manera, la presencia de las unas y la solidez de las otras se disputan su afección; así como la vanidad de las unas y la ausencia de las otras excitan su aversión, a grado tal que se agigantan en ella el desorden y la confusión.
Considera que las cosas perecederas ya están pereciendo, si no es que las ve ya perecidas. Y, frente a la evidente destrucción de todo cuanto ama, se asusta ante esta consideración, al ver que cada instante le arrebata el goce de su bien y que todo cuanto le resultaba más querido se le escapa sin tregua, y que, al fin, un día inevitable llegará en el que se verá despojada de todas las cosas en las que había depositado su esperanza…
De esta manera, el alma no puede más que comprender perfectamente que, si su corazón tan sólo se apegó a cosas frágiles y vanas, es inevitable que se encuentre sola y abandonada al dejar esta vida, puesto que no procuró unirse a un bien verdadero y autosuficiente, capaz de sostenerla durante y después de esta vida.
En esto reside el motivo que la lleva a considerar como una nada todo aquello que debe volver a la nada, el cielo, la tierra, su espíritu, su cuerpo, sus parientes, sus amigos, sus enemigos, los bienes, la pobreza, la desgracia, la prosperidad, el honor, la ignominia, la estima, el desprecio, la autoridad, la indigencia, la salud, la enfermedad y la vida misma; en suma, todo lo que ha de durar menos que el alma es incapaz de satisfacer el deseo de esta alma que busca seriamente establecerse en una felicidad tan duradera como ella misma. "



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