Ajuste de cuentas (fragmento), de Imaginaciones pecaminosas "La cara de Orozimbo Preto parecía de pocos amigos, había media sonrisa amarga en su boca (¿o era más bien una mueca?) que dejaba ver la punta de sus dientes oscuros, la boca casi sin labios. El ojo izquierdo pestañeaba muy seguido, al contrario del derecho, brilloso y fijo como si fuera de vidrio. Con su horrible facha y ahí parado, empuñando el H.O., Orozimbo Preto parecía esperar algo. ¿Por qué? Fue todo lo que Valeriano consiguió decir con gran esfuerzo. Ya sabes por qué, fue lo que me mandaron decirte, dijo Orozimbo. Pero Orozimbo Preto todavía no se decidía a hacer el trabajo. Y si yo me fuera de la ciudad, si nunca más vieran mi cara, preguntó intentanto una última salida. No recibí órdenes para decidir, no era conmigo con quien tenías que hablar, dijo Orozimbo Preto. ¿Con quién entonces? dijo Valeriano cansado de saber con quien tenía que hablar, si le dieran una oportunidad. No sé, yo no tengo nada que ver, dijo Orozimbo. Sólo me mandaron preguntar si conocías este H.O. Me parece que es el mío, dijo Valeriano. El que te olvidaste en cierta casa donde nunca debías haber ido, dijo Orozimbo Preto. ¿Hay algo que yo pueda hacer? preguntó Valeriano después de un silencio sofocante. Creo que no, dijo Orozimbo Preto. A propósito, ¿este H.O. falla? A mí nunca me falló, dijo Valeriano decidido, su vida ya no valía nada. Vamos a ver, dijo Orozimbo Preto y apretó el gatillo. Un estruendo, un ruido, Orozimbo Preto todavía tiró dos veces más sobre el cuerpo caído en el suelo. Traducción: Cecilia Garat" epdlp.com |