Romanticismo y revolución (fragmento)Charles Maurras
Romanticismo y revolución (fragmento)

"Ni el espíritu de familia, ni el espíritu de partido, ni el interés político que habría morigerado a cualquier otro ginebrino habrían sido capaces de atemperar la rabia mística de Jean-Jacques Rousseau, este trillador de estrado infortunadamente nacido, erróneamente fustigado por una vieja damisela y corrompido hasta la médula por sus primeros amigos. Capaz de desempeñar cualquier oficio, incluyendo los más desagradables, lacayo y querido a la vez, maestro de música, parásito, hombre entretenido, poco a poco se instruyó por sí mismo: carecía tanto de capital intelectual como de capital moral. (...) Nacido sensible y versátil, le resultaba del todo imposible apegarse a la fuerza de la verdad; sus diferentes razonamientos sólo concordaban con la cadencia de su lamento, y encontramos en él, en dosis casi iguales, al criminal, al salvaje y al simple loco."


El Poder de la Palabra
epdlp.com