El hotel Dunav "Estos brazos tan delgados los tengo como él a veces también me gusta emborracharme bien como corresponde a la hija del jefe de sala del hotel pequeña payasa, lo veía en el acto escondida detrás de las máquinas de póquer, bien sobornada con el chocolate de duty free que a Vukovar llegó demasiado tarde como la Cruz Roja Internacional como la humanidad como, en general, todo lo bueno llega con retraso eterno a esta parte del mundo estos brazos tan delgados los tengo como él no me da pena por mí sino por, cómo podía defenderse con ellos cuando le pegaban. " epdlp.com |