El paseo (fragmento)Robert Walser
El paseo (fragmento)

"¿No es encantador cómo corrijo los errores y allano las faltas? Al hacer concesiones, demuestro ser pacífico, y al redondear los bordes y ablandar las durezas soy un fino y sutil moderador, muestro sentido del buen tono y soy diplomático. De todos modos he quedado mal; pero espero que se me reconozca la buena voluntad. Si alguien dice aún que soy un hombre desconsiderado, autoritario y prepotente, que se lanza ciegamente contra las cosas, afirmo, es decir, me atrevo a esperar que tengo razón en afirmar, que la persona que tal dice yerra gravemente. Quizá nunca un autor haya pensado en el lector, de manera constante, tan tierna y gentilmente como yo. Bien, ahora puedo enamorarme obsequioso de palacios o nobles mansiones, de la siguiente forma: arrojando un triunfo en toda regla; porque con una tan semi decadente casa solariega y patricia, con una noble sede y casa señorial, envejecida por el tiempo, rodeada de un parque, orgullosa, como esta que aparece ahora, se puede hacer ostentación, suscitar atención expectante, despertar envidia, provocar admiración y cosechar honores. Algún pobre pero fino literato vivía con gran gozo y máximo placer en semejante palacio o castillo, con patio y entrada para principescos coches con escudos de armas. Algún pintor pobre pero hedonista sueña con una estancia temporal en una preciosa y antigua propiedad rural. Alguna muchachita de ciudad, instruida pero quizá pobre de pedir, piensa con melancólico arrobo e ideal celo en estanques, grutas, altos aposentos y ella misma servida por solícitos criados y nobles caballeros. En la casa señorial que yo veía, es decir, más bien sobre ella que en ella, se podía ver y leer la fecha 1709, lo que por supuesto aumentó vivamente mi interés. "


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