De la arquitectura alemana (fragmento) Goethe
De la arquitectura alemana (fragmento)

"Cuantas veces el crepúsculo refrescó con amigable tranquilidad mi vista cansada por el mirar escrutador; entonces hizo que se fusionaran en masas enteras las innumerables partes y sólo aquellas se presentaron ante mi alma, simples y grandes, y mi fuerza des desplegó llena de deleite para gozar y conocer al mismo tiempo! En esos instantes se me reveló con leves presentimientos el genio del gran maestro de la obra!. Por qué te sorprendes?, me susurró. Todas estas masas eran necesarias ¿no las ves en todas las iglesias antiguas de mi ciudad? sólo he elevado a relación acertada sus proporciones arbitrarias. La forma cómo, sobre la entrada principal, que domina a dos más pequeñas al costado, se abre el ancho círculo del ventanal correspondiente a la nave de la iglesia, mientras anteriormente no había sido sino un hueco para dejar entrar la luz, la forma cómo la jaula del campanario, arriba en lo alto, necesitaba ventanas más pequeñas...¡todo ello era necesario y yo le di su hermosa figura!
(...)
Con estas palabras se despidió de mí y yo me ensimismé en compasivas tristeza hasta que los pájaros de la mañana, que habitan en los miles de aberturas de la catedral, cantaran jubilosos y me despertaran del sueño. ¡Con qué frescura me brilló la catedral en el esplendor de aromática mañana, con qué alegría podía extender hacia ella mis brazos y mirar las grandes masas armoniosas, vivificadas en innumerables partículas como sucede en las obras de la eterna naturaleza, siendo todo, hasta la fibra más diminuta, forma y todo, medio para el conjunto!. ¡Cómo se eleva liviana en el aire la inmensa construcción de firmes basamentos, cómo todo está calado y, sin embargo, construido para la eternidad!. Debo a tus enseñanzas, ¡oh genio! el que yo no sienta vértigos ante tus profundidades, que en mi alma se deposite una gota de ese delicioso goce del espíritu el cual puede mirar desde lo alto a semejante creación."



El Poder de la Palabra
epdlp.com