Arte de pensar (fragmento)Antoine Arnauld
Arte de pensar (fragmento)

"Aprehensio. Llámase concebir o aprehender la simple vista o contemplación que tenemos de las cosas, que se hacen presentes a nuestro entendimiento, como cuando nos representamos un sol, una tierra, un árbol, un círculo, un cuadrado, el pensamiento, o el Ser, sin formar juicio alguno expreso de estas cosas. Y la forma con que nos la representamos se llama Idea, concepto o simple aprehensión.
Iudicium. Llámase juzgar o juicio la acción de nuestro entendimiento por la cual uniendo él juntamente diversas ideas afirma de la una que es la otra, o niega de la una que sea la otra, como, cuando teniendo la idea de la tierra y la idea de lo redondo, afirmo de la tierra que es redonda, o niego que sea redonda.
Discursus. Llámase raciocinar o discurrir la acción de nuestro entendimiento con la cual infiere o deduce un juicio de otro u otros juicios: como cuando habiendo juzgado que la verdadera virtud debe referirse a Dios, y que la virtud de los paganos no era referida a él, concluye de esto el entendimiento que la virtud de los paganos no era verdadera virtud.
Methodus. Llámase ordenar aquí la acción del entendimiento, por la cual teniendo sobre un mismo sujeto, v. gr. sobre el cuerpo humano, diversas ideas, diversos juicios y diversos discursos, los dispone con el modo más propio para dar a conocer este sujeto, y esto es lo que también se llama método.
Todo esto se hace naturalmente y algunas veces lo ejecutan mejor los que no han aprendido reglas algunas de la Lógica que los que las han aprendido. Así esta arte no consiste en hallar el medio de hacer estas operaciones, pues sola la naturaleza nos las suministra, dándonos la razón, sino en hacer reflexiones sobre lo que la misma naturaleza nos impele a hacer, las cuales nos sirven para tres cosas.
La primera, para estar asegurados de que usamos bien de nuestra razón, porque la consideración de las reglas nos facilita poner en ella nueva atención.
La segunda, para descubrir y explicar más fácilmente los errores y defectos que pueden encontrarse en las operaciones de nuestro entendimiento y el origen y causas de ellos: porque frecuentemente sucede descubrirse con sola la luz natural que un discurso o razonamiento es falso y con todo ello no se percibe la razón, por qué motivo es falso, como a los que no saben de pintura puede muy bien parecerles un cuadro muy mal sin poder con todo ello explicar cuál es el defecto o defectos que encuentran en él.
La tercera, para darnos a conocer mejor la naturaleza de nuestro entendimiento con las reflexiones que hacemos sobre sus operaciones. El cual conocimiento es mucho más excelente en sí, aun siendo meramente especulativo, que el conocimiento de todas las cosas corpóreas, que son infinitamente inferiores a las espirituales. "



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