Ángel Fernández de los Ríos

España | 1821-1880

Escritor y político español nacido en Madrid. De ideas progresistas, tomó parte en todas las revueltas de la época isabelina, oponiéndose siempre a través de escritos periodísticos o con acción directa a los gobiernos conservadores y también a los liberales que abandonaban sus principios. Formó parte del Partido Progresista, y luego, durante el Sexenio Democrático, del Partido Radical. Por entonces tuvo algunos puestos políticos en las Cortes y Senado y en el ayuntamiento de Madrid. Detenido varias veces, tuvo que exiliarse dos, antes y después del Sexenio Democrático. La segunda no pudo regresar y murió fuera de España. Su labor periodística fue muy grande, y en sus variados escritos se ocupó de temas dispares como la política, el urbanismo o la educación. Fundó y dirigió los siguientes periódicos, Las Novedades (el primero que tuvo gran circulación), La Ilustración Española y Americana, El Semanario Pintoresco (1846-1855), El Siglo Pintoresco (1845-1847), El Agricultor Español (1851), La Soberanía Nacional (1864-1865, republicano y revolucionario), Los Sucesos (1866) y otros. También fue redactor en otros periódicos liberales. Creó una colección de obras humanísticas y científicas llamada "Biblioteca Universal" para difundir la cultura por el país. Escribió numerosos libros y textos de temas madrileños, autobiografícos y políticos, entre ellos, Estudio político y biográfico sobre Olózaga, La luchas políticas en la España del siglo XIX (1879), Guía de Madrid, El futuro Madrid, La exposición de 1878, Mi misión en Portugal, Una semana en Lisboa, Itinerario pintoresco de Madrid a París, La tierra, Los percances de la vida, Muñoz Torrero, El tesoro de cuentos, Album biográfico, O todo o nada, Un proyecto de escuela laica (1880) y otros. Tradujo a los franceses Alphonse de Lamartine, Eugène Sue, Laurent y Alphonse Karr. Desarrolló un proyecto urbanístico de gran modernidad: un centro con servicios y una periferia residencial, con buenas comunicaciones entre ambas. Los barrios contarían con toda clase de infraestructuras y las viviendas serían unifamiliares, con jardín independiente. Aportó además soluciones urbanísticas concretas para Madrid en la época en que formó parte de su ayuntamiento (después de 1868). Propuso la construcción de un ensanche a partir de la Puerta de Alcalá, la reforma del entorno del Palacio Real y la edificación de mercados y estaciones con el empleo del hierro. Asimismo, estudió la mejora de los barrios obreros, a los que quiso dotar con casas parecidas a las de la ciudad francesa de Mulhouse (dos plantas y jardín) y de servicios sanitarios, educativos y otros. Los fondos serían aportados crediticiamente por cajas de ahorro, devueltos por los dueños a largo plazo. A pesar de la indudable bondad de sus proyectos, quedaron sin realizarse por falta de posibilidades. Poco antes de morir escribió Un proyecto de escuela laica donde, a semejanza del krausismo que inspiraba la Institución Libre de Enseñanza, promovía la coeducación y la aplicación de los últimos adelantos pedagógicos, la secularidad en la educación y el espíritu científico. © Bernardo Gómez Álvarez

Textos:

El Napoleón (fragmento)
Olózaga: Estudio político y biográfico (fragmento)